Ana Peláez se ha proclamado campeona del Abierto de Madrid Femenino, prueba valedera para el Ranking Mundial, disputada a 54 hoyos en el trazado de Golf Santander. La malagueña, líder de principio a fin, se ha impuesto con tres golpes menos que la guipuzcoana Natalia Aseguinolaza y cuatro de ventaja sobre la catalana Paz Marfá. Clara Moyano se ha adjudicado el trofeo como mejor madrileña.
El partido estelar de esta última jornada lo componían Ana y Natalia junto a la valenciana Belén Amorós. A pesar de que la ganadora partía líder con cinco y seis golpes menos que sus compañeras, sus cuatro bogeys consecutivos del tres al seis, por dos aciertos y un error de la guipuzcoana, han puesto freno a lo que parecía iba a ser un paseo triunfal de la malagueña, quien, por un momento, ha llegado a temerse “lo peor”.
Ana Peláez: “Este trofeo es un paso más en mi carrera y me ha servido para seguir cogiendo experiencia. He hecho cuatro bogeys por culpa de la ansiedad, quería hacer más birdies en hoyos que no tocaba. En el siete he decidido que no podía seguir así, que debía tener más paciencia y a partir de ahí he jugado mejor: todo pares hasta el final, algunos muy buenos, y otros que considero se deberían haber convertido en birdies. El putt no ha funcionado, aunque no puedo decir que haya fallado. El mejor golpe ha sido una sacada de bunker en el 15.
“Estoy muy contenta por haber ganado en un campazo como Golf Santander, en el que tienes que sacar tu mejor juego; aquí no sirve ser bueno en los golpes a 60 metros, no, en este campazo tienes que saber jugar tu mejor golf también a 100 y a 200 metros. Y, sobre todo, saber por dónde atacar los greenes, que son moviditos”.
La malagueña de 17 años, jugadora de Río Real (Marbella) e integrante por segundo año del equipo de la Escuela Nacional Blume, suma este triunfo a su brillante palmarés que incluye varios Campeonatos de España de Pitch&Putt en distintas categorías, el Dobles de España Mixto, medalla de oro en el Campeonato de Europa por Equipos Sub-18 en 2015 y el prestigioso Annika Invitational, también en 2015. “Todas las victorias son importantes pero las más especiales han sido el oro en el Europeo, porque contribuí a que ganase nuestro equipo, y el Annika, porque me di cuenta de que sola también podía lograrlo”, apostilla la campeona del Abierto de Madrid, que en agosto se marchará a la Universidad de South Carolina a estudiar “Business”.