Como ya decíamos ayer, Luke Donald (-9) se está gustando en las últimas semanas, y si el domingo pasado terminaba segundo en el RBC Heritage, torneo fetiche para el inglés, ahora vuelve a tener una oportunidad de oro para romper una sequía de cuatro años sin ganar en el PGA TOUR. Demasiado tiempo para un jugador que fue el número 1 del mundo y que todavía se encuentra en plenas condiciones físicas.
Sin embargo, Donald no será el único europeo con opciones de victoria en el Valero Texas Open, también tenemos en el sexto puesto a un viejo conocido nuestro, Padraig Harrington, jugador irlandés que le “arrebató” el Open Championship a Sergio García. Pues bien, el irlandés se encuentra emplazado en la sexta plaza con -7 a cuatro golpes del líder.
Un líder, Ricky Barnes (-11), que ha conseguido una corta ventaja de un golpe a falta de la jornada final, en la que podría ser su primera victoria en el mejor circuito del mundo después de disputar 222 torneos, si contamos el que se está jugando ahora mismo. Parece ser que a sus 35 años ya va siendo un buen momento de que se dé una buena alegría, su mejor resultado fue en 2009 que quedó segundo en el U.S. Open.
El norteamericano lo tiene claro: “Estaría mintiendo si dijera que será una semana exitoso si al final de salir ahí fuera no gano,” dijo Barnes. “Esto es por lo que jugamos. Salir a jugar los domingos y tener una oportunidad de ganar.“