La malagueña Noemí Jiménez se ha adjuntado la segunda prueba del Santander Tour que se jugaba en el Club Zaudín Golf, tras imponerse en el primer hoyo de desempate a Lucy Goddard, con quien había finalizado empatada en -10 total, habiendo entregado la inglesa la vuelta más baja del torneo, 61 golpes.
Noemí vuelve hoy a casa con casi todos los premios: el trofeo y el talón del Banco Santander (6.000€) que acreditan a la ganadora, el codiciado Cinco Jotas de Osborne a la mejor española, y dos billetes de Air Europa a cualquier destino europeo por ser la primera andaluza. Las dos noches en un Parador han correspondido a Marta Silva por dejar la bola a 0,98 centímetros en el hoyo seis, y Patricia Márquez se ha llevado otros dos billetes de Air Europa como mejor amateur.
Nuria Iturrios, que salía como líder a la segunda jornada, dominó el torneo hasta el hoyo siete que saldó con birdie; sin embargo, un inoportuno error en el nueve –par 3- frenó su ritmo y el buen juego de las últimas semanas, siendo cuarta a su paso por la mitad del recorrido, mientras que Raquel Carriedo –cuarta a la postre-, Lucy Goddard y Noemí Jiménez ocupaban los primeros puestos de la tabla.
La inglesa, Campeona Amateur de Irlanda en 2014, que ayer estuvo a punto de retirarse con problemas estomacales, pero al final terminó firmando la mejor tarjeta de su carrera, 61 golpes con ocho birdies y un eagle.
Mientras tanto, Noemí, con su padre llevándole los palos y recordándole en cada golpe la palabra mágica, “rutina, rutina y rutina”, y su madre animándola, iba tirando de fuerza mental siguiendo los consejos de Joseba del Carmen, el coach que también trabaja con Jon Rahm: “A mi padre y a Joseba les debo parte de esta victoria.
“Hice birdie en el hoyo uno metiendo un putt de cuatro metros; en el cuatro, la dejé dada con el chip; en el ocho, de dos en green y casi hago eagle; en el diez me fui con el Drive al rough de la izquierda pero tenía buen ángulo, pegué un hierro seis y la dejé a metro y medio; en el doce, otra vez casi eagle; y en el 17, aunque estaba nerviosa e intentaba cambiar los pensamientos, jugué un hierro siete a colocar y la dejé a metro y medio con el pitching-wedge.
“En el tee del hoyo 18, jugando el play-off, dudé si pegar el Drive o la madera 3 pero pensé, si cambias de estrategia estás asumiendo que puedes fallar, y pegué un draivazo dándolo todo, pensando que no era el hoyo del play-off y me quedaban otros tres o cuatro por delante. Seguí un consejo que le oí a Jason Day: primero visualicé el golpe y luego me dije “estás tú sola, la bola y el campo”. Le pegué con todo lo que tenía.
“Me ha hecho mucha ilusión ganar con mi padre haciéndome de caddie. Ayer se levantó a las 3.20h y dijo “voy a ver a mi hija, que la tengo aquí al lado y luego se me va a Nueva York que está muy lejos”. Y me dio la sorpresa. Él me ha entrenado siempre y me ha ayudado mucho con la técnica.
“Llegué aquí sin ninguna confianza y ganar ha sido un subidón. Venía de una racha mala y últimamente he estado mejorando el entrenamiento. Sé que debo seguir trabajando y entrenando duro, el golf me ha demostrado una y mil veces que estando arriba puedo terminar consiguiendo objetivos. Tengo muchos sueños, jugar la LPGA, la Solheim Cup… pero sé que debo ir día a día, poco a poco, entrenando y dando el cien por cien. No hay otra manera de conseguirlo”.
El próximo torneo del Santander Tour tendrá lugar del 23 al 25 de junio en Izki Golf, Urturi (Álava).