Ayer dio comienzo la primera ronda del Farmers Insurance Open en San Diego, donde Scott Brown y Andrew Loupe, ambos con -6, son los primeros líderes del Farmers Insurance Open.
Eso sí, mientras que Brown jugaba en el South Course, que es más difícil, Loupe jugaba en el North Course, que en principio es más sencillo, hoy la media era de dos golpes menos que en el otro campo. Y de los 33 jugadores que se hacían sesenta y algo tan solo 12 lo construían en el South Course.
Además, a la actuación de Brown hay que sumar la gran recuperación que ha hecho, y es que en los primeros siete hoyos marchaba -2, pero una gran reacción de 8 birdies en 11 hoyos le hacían alcanzar los puestos nobles.
“Muy difícil“, dijo Brown acerca del recorrido sur, que ya ha acogido un U.S. Open y que volverá a acogerlo dentro de cinco años. “Pero es justo. Simplemente es difícil. Si estás fuera de calle, tienes que jugar para hacer par o bogey y no puedes arriesgar para hacer birdie“.
El defensor del torneo, Jason Day, que se perdió el Pro-am porque tenía gripe, hizo el par en el North Course con una vuelta inconsistente con cuatro birdies y cuatro bogeys, hacía +2 por sus segundos nueve hoyos. Otro favorito que no ha respondido a las expectativas, al menos por ahora, es Rickie Fowler, que viene de ganar en Abu Dhabi, hoy registraba +1 en el North Course, puede que le haya afectado el jet lag.
Fowler echaba las culpas al putt, al tener una jornada aciaga y ya está pensando en embocar un putt tras otro en el South Course.
Phil Mickelson se marcó un -3 en el South Course, lo que le sitúa en la decimoquinta plaza. Buen resultado para el californiano, más si tenemos en cuenta que en su segundo hoyo hacía doble bogey, sin embargo, a partir de ahí ha hecho seis birdie y un único bogey.
Por supuesto, no nos podemos olvidar del debut en el PGA TOUR de dos jugadores llamados a hacer grandes cosas en el futuro del golf. Por una parte, el irlandés, Paul Dunne, firmaba 69 golpes en el South Course gracias a cuatro birdies y un bogey
Por otra parte, tenemos a Ryan Ruffels, jugador australiano de 17 años del que ya hablamos hace unos días. Pues bien, el futuro del golf australiano, hijo de dos ex tenistas profesionales, Ray Ruffels y Anna-María Fernández y ganador del Junior World Championship en Torrey Pines, ha empezado de la mejor manera su andadura como profesional, ganando de dos golpes al North Course y situándose en el puesto 34.
Ruffels, nuevo jugador de Nike, se ha convertido en el jugador australiano más joven en disputar un torneo del PGA TOUR. Además, antes de hacerse profesional marchaba en el treceavo puesto de la clasificación mundial amateur, fue el golfista más joven en ganar el prestigioso Riversdale Cup (2014) y ha finalizado dos veces entre los 25 mejores en el Australian Open.