Ayer en la última jornada del Masters, el número dos del mundo, Jordan Spieth disfrutaba de una ventaja de 5 golpes a falta de nueve hoyos por jugar y desplegando un juego de película. Empezó la segunda vuelta con bogey al 10, no pasaba nada, seguía cuatro por delante, en el hoyo siguiente fallaba un putt de metro y medio para par y la distancia se ya bajó a tres a falta de siete hoyos, pero todo se vino al traste cuando en el mítico hoyo 12 de Augusta el americano tiró dos bolas al agua y acabó firmando 7, cuadruplebogey. Acabado ese hoyo se puso tres por detrás de Danny Willett, que fue el que ganó el torneo. Sin duda alguna este será un Masters muy difícil de olvidas.
Jordan Spieth had a 7 at the 12th hole, here’s the whole painful sequence pic.twitter.com/LXSJuOkjCW
— The Cauldron (ICYMI) (@CauldronICYMI) 10 de abril de 2016
